Estudiantes y egresados de la Universidad Veracruzana desarrollaron un prototipo de mano mioeléctrica, sistema que interpreta señales a partir de la electricidad generada por los mismos músculos del paciente al moverse.
En un comunicado de la universidad comenta que es el seguimiento a la investigación de una prótesis mecánica de mano de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME), el autor del seguimiento es el egresado e ing. Gustavo Barrios Sierra.
Queremos que los pacientes tengan la sensación de que realmente es una parte de ellos, que sea menos invasiva y no se tenga que flexionar todo el brazo para sujetar los objetos.
Un avance hacía el futuro
En diciembre de 2017 fue concluida la primera etapa de este proyecto en el Laboratorio de Investigación en Mecatrónica Aplicada, por Luis Enrique Escobar Jiménez, creador de una prótesis mecánica de mano que le fue adaptada a Jacob, un menor de siete años de edad.
Gustavo contribuyo con la parte electrónica, creando la semi-automatización de la prótesis y así pudiera cerrarse la mano sin necesidad de que el paciente contrajera todo el brazo, es decir, que el prototipo funciona por medio de señales mioeléctricas que se leen a partir de la electricidad generada por los músculos al moverse.
Gracias a Gustavo, los pacientes pueden tener la sensación de tener un brazo real, o por lo menos no sentirse tan incómodos con la prótesis.
El dispositivo es de gran utilidad porque una vez que se interpreta la señal mioeléctrica, a través de la placa de circuitos denominada arduino, ésta se envía a un servomotor junto con una instrucción para que gire determinados grados, jale los tendones y cierre la mano.
A través de la computadora y del programa arduino, logran percibir la electricidad del movimiento de los músculos.
Gustavo Barrios indicó que cada pieza fue igualmente replicada en una impresora 3D, como en el anterior proyecto, con el fin de volver a imprimirlas cada vez que se dañen.